miércoles, 15 de junio de 2011

Relatos

  Quiero escribir. Me muero de ganas. Pero hace rato que estoy sentado con la PC y no sale NADA. Me dedique a hacerle algunas modificaciones al blog. De a poco voy entendiendo como usarlo. Les mentí. No es que no salga nada. Hay demasiadas cosas en mi cabeza dándome vueltas. No se a cual de todas ellas atarle el cabo y bajarla a tierra. o bajarla al ciberespacio. Ni idea si es tierra o no. Digamos bajarla a tierra, de ultima queda como metáfora. Muchas cosas en estos días dignas de mencionar. Material para escribir tengo, el tema es que no se por donde arrancar. Hoy a las 3 de la tarde me despedía de mi hermano en una esquina. Vereda llena de hojas, ya todas amarillas. Casi el mismo tono que las baldosas. Constantemente me llovían las semillitas del árbol (creo que eran las semillitas), caían flotando por el aire muy suavemente. De un rojo anaranjado. No había viento. Era una hora y una esquina en la que todas las tonalidades eran bastante amarillentas y anaranjadas. Claro, la época del año también ayudaba a eso. Otoño. Sin motivo alguno baje la mirada y me di con que tenia agarrado a mi zapatilla el bicho mas extraño que vi en mis últimos 2 años ¿? Debo admitir que me cague un poco por una milésima de segundo. Mi cabeza estaba en otra, no se lo esperaba. Era algo así como una abeja mutante. Tenia todo el aspecto de abeja, pero muuuucho mas grande, casi del tamaño del dedo gordo de un pie adulto que calza 45 y sufre de sobrepeso. Muy peluda, amarillentamente peluda, y de ojos grandes. Movía el pie y ni se movía el ser este. La filmamos con un Ipod, mi hermano también estaba impresionado ante este ser. Le quisimos sacar una foto pero no se porque no pudimos. Cuando me fui, se la llevo a su oficina para sacarle ahí la foto. Espero que haya podido, así después me la manda y les muestro el bichote. En una de esas alguien me tira el nombre. En el aeropuerto se dieron otras tantísimas cosas dignas de mencionar. Que mundos tan particulares, los aeropuertos. Son muy extraños. Pasando un día en uno de estos, te da data para escribir tantas novelas o cuentos como quieras. Más si el 90 % de los vuelos están suspendidos pero a vos te dicen que el tuyo sale, te hacen despachar el bolso y llegas hasta pre embarque. Eramos los únicos en pre embarque en todo aeroparque. Creo que era demasiado obvio. Que loco. La mayoría de la gente se la pasa hablando por cel o, lo que es peor, mirándolo. Uno esta al pedo y mira su cel. También me pasa, lo admito. A medida que pasaba el tiempo y no había noticias, la gente se inquietaba, se impacientaba. Se les notaba en las caras, y en las actitudes. De repente te das con que todos charlan con quien tengan al lado. Se empiezan a armar pequeños concilios. Grupito por acá, otro por allá. Todos opinan. Que hablé con tal, me dijo tal cosa. A mi me dijeron que tal otra. Que la situación del país, que que mal la atención de Andes que nadie nos informa. Inmediatamente surge un líder. "Ahí viene alguien de Andes", dice uno. El líder cumple su rol y lo encara. Vuelve con cara de no haber conseguido respuesta. La gente se empieza a inquietar. Llamadas por todos lados, los mismos comentarios y charlas desde todos los flancos. Llega el cole que nos traslada hasta el avión. La mitad de la gente sale disparada a hacer la respectiva cola. Yo soy de los que se quedan en el lugar. Pasados unos 10 minutos, la cola se fue desintegrando lentamente... un desertor por acá... otro desertor mas adelante. Se vuelven a ubicar en asientos de espera. Un regordete petison de suéter Lacoste verde manzana se pone a leer "La conspiración de los ricos", su compañero lee "Padre rico, padre pobre", yo intenté retomar mis "Relatos" de Cortázar pero la situación de mi alrededor me estaba enganchando más. Usado. 50 $. Incluye varios de sus libros de cuentos. Regalo de mi hermana el día anterior. Pero la mayoría esta sumamente atenta a su celular, como si les fuera a dar una respuesta a la situación. Una respuesta que no llega por los altavoces. Luego del pequeño paréntesis que causo la llegada del colectivo, se retoman los concilios. "Por la dudas no vallan mucho al baño, miren si nos llaman en cualquier momento". Una vieja, obvio. Conjeturas, hipótesis, que el volcán, el viento, las cenizas, Cristina, copa América, Palermo, la situación en Medio Oriente, los vuelos 856 y 890 de Andes Lineas Aéreas se encuentran cancelados. Creo que era obvio. El concilio se dirige a la oficina de Andes. Los concilios en realidad. Nuevo horario, indicaciones, fin. Se levanta la sesión. La gente se dispersa, se dirige a buscar sus valijas. Somos todos amigos, el instinto de supervivencia humano ante situaciones criticas, al limite, como esta que vivimos, ¿no? Me despido de tini, de Jose, nos abrazamos con Carlos. Quedamos todos en vernos mañana. Probablemente en Salta nos juntemos a partir de ahora todos los segundos martes de mes para rememorar esta fecha.
  Material para escribir tengo, el tema es que no se por donde arrancar...

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