Es un mundo extraño este, el de los shoppings. En algunos aspectos me hacen acordar a los aeropuertos o terminales. Podes estar en cualquier lugar de estos en el mundo y hay una esencia básica que se mantiene constante, una búsqueda de homogeneidad. Mas grandes, mas chicos, una a arquitectura u otro, pero todos mantienen algo en el ambiente que los unifica. En el caso de los aeropuertos y terminales es mas característico, siempre lo pensé. Ahora lo pienso también respecto a los shoppings. Estoy sentando en uno en este momento. Cerveza en mano y en el punto mas alejado de todo posible contacto social. Si, siempre busco evitar el contacto social, aunque oarezca paradójico en un shopping. Estos acá porque estoy esperando para entrar a ver a Nemo con mi novia, nada mas. Pero es chistoso, siempre que entre a un shopping me sentí perseguido, observado, como que haya un Gran Hermano controlando todo lo que sucede aquí dentro. Ninguna duda que están mira do todo lo que hacemos, pero claro que no están mirando que hago yo en particular. Así y todo, nunca me sentí cómodo en estos lugares. Tengo la sensación que cuando uno cruza esa frontera que demarca la puerta corrediza y los pisos brillosos y encerado y las luces de los mil negocios del compre ya, uno pierde si identidad. Esta especial la cerveza, y la temperatura, aunque me arrancaron la cabeza. Es que, justamente, estaba especial para pedirse una y ponerse a escribir mientras espero. Perdida de identidad. Claro que suena medio exagerado, pero esa es la sensación que me deja. Uno entra y zas, algo pasa. Justo cuando termina la segunda rotonda de Tres Cerritos, las grande, la también llamada Plaza de los Deportes, que tiene un tanque de agua, a mano derecho yendo hacia Parque Belgrano, pueden encontrar los dos kilos de milanesas de pollo a $ 48. Lo mas loco de todo, es que hace una semana y media compramos ahi mismo los 2 kg a $ 50!! Aprovechen, son pocas cosas las que bajan de precio en este país, hasta ahora, que yo sepa, las milanesas estas y los ravioles Il Zapore. Que lugar tan extraño el shopping che. Y todos los shoppings a los que entre, de Argentina y de algún otro país en el que pude andar (que no es que sean muchos) me dejaron la misma sensación. La idea de fondo, la estética, es exactamente la misma, acá y en la China. Teléfono, mi novia, esta perdida, a 5 cuadras de acá. Así que no esta perdida, pero parece estarlo. La cerveza esta especial pero se esta calentando. Tienen que hacer como los brasileros, no hay bar en el que no te den la cerveza adentro de los cosos esos de telgopor que te la mantienen fría. Básico y elemental. Ojala lo implementen en algún lugar para el verano. Cosas de la vida, hace unos dias estábamos buscando Yapa en los kioscos de la facu (si, las pastillitas esas de la tira larga) y no había por ningún lado, pensé que ya no venían. Pago las entradas para Nemo y... que me dan de vuelto? Una Yapa, ja! Impresionante.
En fin, los dejo con esta ensalada de frutas sin sentido. Piénsenlo, lo de las milanesas sobre todo, los ravioles no tanto porque no son taaaaan ricos. También piensen lo de los porta cervezas, esos los venden en casas de telgopor sobre la Pellegrini, yo tengo uno. Realmente funcionan y se viene el veranito.
Que lugares extraños estos, los shoppings...